Angeles, nada menos que ellos, venian hacia mi con el corazon roto pero abierto.
Inocentes del dolor que yo, (in)sensible humano les provocaria.
El mar tambien llora, pero con lagrimas de aceite,
lentamente se va borrando.
Si deseaba un golpe de suerte aca no lo voy a encontrar.
Si se rompe el instrumento, el angel cae. Demuestra que el cielo no es tan alto,
no tan alto como el infierno.
Mas bien es un golpe de Frente.
martes, 1 de marzo de 2011
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2 comentarios:
increible
Interesante la mezcla de realidad y ficción. Una mezcla de ecologismo racional con castigos divinos...
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